La mejor receta de sopa de pollo
El ajo, el jengibre y el cúrcuma son ingredientes imprescindibles para la sopa de pollo si quiere asegurarse de que su próxima tanda de “penicilina judía” sea un verdadero antigripal y no un mero remedio popular. También es esencial un caldo de pollo bien preparado. La proteína de pollo proporciona una amplia fuente de cisteína, un aminoácido químicamente similar a un fármaco conocido como acetilcisteína, que puede eliminar la mucosidad. La gelatina del caldo real también añade una textura aterciopelada y un rico sabor.
1. Para hacer el caldo, coloque el pollo entero (más los trozos adicionales: patas, cuellos, alas, etc.) en una olla grande, con las verduras, las hierbas y el vinagre. Cúbrelo con agua fría.
Truco Frugavore: Después de retirar la carne de los huesos, puedes hacer otra tanda de caldo cubriendo los huesos con agua, añadiendo un poco de tomillo, apio, zanahoria y cebolla y cociendo a fuego lento durante dos horas más. Utilízalo como base para tu próxima sopa.
¿Qué contiene la sopa de pollo que ayuda cuando se está enfermo?
El caldo caliente y claro les ayuda a mantenerse hidratados y les abre temporalmente las fosas nasales. Los demás ingredientes típicos -sal, especias, verduras, pollo y fideos- aportan electrolitos, proteínas e hidratos de carbono que el organismo de tu hijo necesita en los momentos en que no come ni bebe tanto como de costumbre.”
¿Es buena la sopa de pollo para los enfermos?
Hay una razón por la que la sopa de pollo se ha recomendado como cura para el resfriado común durante cientos de años. Es fácil de comer, una gran fuente de vitaminas, minerales, calorías y proteínas. También es una forma estupenda de aportar líquidos y electrolitos al organismo, sobre todo si se tiene fiebre o diarrea.
Receta de sopa de pollo con fideos
Las fiestas navideñas pueden ser una de las épocas más maravillosas del año y también una de las épocas en las que más enfermamos. Hacemos todo lo posible por no resfriarnos ni coger la gripe, pero, por desgracia, no siempre es posible evitar esas molestas enfermedades invernales.
El proceso de curación puede llevar tiempo, pero los alimentos que comemos son una parte clave para garantizar que nuestro cuerpo se recupere adecuadamente. Cuando estamos enfermos, puede ser difícil pensar en los alimentos que debemos comer, por no mencionar que puede ser difícil retener la comida si el estómago no se siente bien.
Hay una razón por la que la sopa de pollo se ha recomendado como cura para el resfriado común durante cientos de años. Es fácil de comer, una gran fuente de vitaminas, minerales, calorías y proteínas. También es una buena forma de ingerir líquidos y electrolitos, sobre todo si tienes fiebre o diarrea.
Incluso se cree que la sopa de pollo es un descongestionante natural porque desprende vapor caliente. Algunos estudios han demostrado que la sopa de pollo es más eficaz para eliminar la mucosidad nasal que cualquier otro líquido estudiado.
Sopa de pollo con fideos curativa
Así que, si eres capaz de reunir fuerzas, puedes incluso añadir uno o dos ingredientes sencillos más para tu variante favorita de sopa de pollo. Añada fideos para la sopa de pollo con fideos, arroz para la sopa de pollo con arroz, col para la sopa de pollo con col o cualquier otra cosa para la sopa de pollo con lo que sea.
Pero hay razones científicas reales para tomar sopa de pollo cuando se está resfriado. Varios estudios han demostrado que la sopa de pollo diluye la mucosidad y alivia la congestión nasal. Esto facilita la tos y la eliminación de la congestión.
Además, la sopa de pollo puede tener un efecto antiinflamatorio. Esto puede ayudar a aliviar la respuesta inflamatoria de su cuerpo durante un resfriado, específicamente dentro de su tracto respiratorio – esta es la razón por la que tiene la nariz tapada.
Como esta sopa tiene mucho líquido y pollo tierno, un topping crujiente es perfecto para añadir una textura diferente. Además, un toque ácido equilibra la riqueza de la carne. Aquí tienes algunas ideas de aderezos:
NotasPara una cocción más rápida: Corte el pollo en trozos antes de cocinarlo. Los trozos separados se cocinarán más rápido que el ave entera. Deje la carcasa dentro mientras el pollo se cocina a fuego lento y deséchela una vez terminado.
Sopa de pollo para el resfriado
Un tazón de sopa de pollo con fideos caliente, humeante y relajante es justo lo que recetó el médico cuando se está resfriado. Aunque los ingredientes de la sopa de pollo con fideos están ahí para dar sabor, también aportan importantes beneficios para la salud.
El caldo aporta líquidos hidratantes y electrolitos como sodio, potasio y magnesio. Esto es especialmente útil cuando se tiene fiebre y se corre el riesgo de deshidratarse. El vapor del caldo caliente también puede abrir las fosas nasales y ayudarte a respirar mejor.
La sopa de pollo con fideos es ligera y fácil de digerir, y bastante nutritiva. Aporta los nutrientes justos para mantener la energía cuando no apetece mucho comer. Una ración de una taza de sopa de pollo casera tiene:
Además de proteínas, también aporta zinc, vitamina A, vitamina C, antioxidantes y otros nutrientes que refuerzan el sistema inmunitario. Esa amplia gama de nutrientes es importante porque todos trabajan juntos para ayudar a tu cuerpo a recuperarse. Si quieres sacar aún más partido a tu sopa, no dudes en añadir otros ingredientes saludables. Algunas buenas opciones son: